Crónica de Download Festival 2017

Esta parece ser la sensación generalizada por todos los allí presentes, que hicieron de La Caja Mágica el epicentro europeo de los ritmos más duros del rock, durante este fin de semana. Tres días de espectáculo, impresionantes interpretaciones, hermandad y recuerdos de los mejores momentos del ya extinto festival de referencia del género en la capital.

Pero vayamos por partes. Si bien es cierto que las primeras horas del jueves estuvieron cerca de sembrar el caos en las entradas, lo que nos aguardaba dentro era un recinto diseñado para disfrutar de la música cómodamente y con grandes espacios de descanso. La sombra era cotizada, y queda pendiente para el año que viene, al igual que un parking cercano para prensa y público que no tiene opción de regresar a sus casas en otro medio de transporte. Pero por otro lado, sería injusto no resaltar la limpieza del recinto, la calidad de las instalaciones, la rapidez de sus servicios y por supuesto..., su cartel.

Más de 100.000 personas han pasado por La Caja Mágica (según la organización) a lo largo de los tres días, siendo el viernes el gran día, para disfrutar de los conciertos de más de sesenta formaciones, donde hubo luces y sombras entre las bandas más esperadas, además de confirmar el increíble nivel que tienen nuestros compatriotas, que sin duda miran de frente a la mayoría de las propuestas internacionales, por lo que esperamos más número de ellas en las próximas ediciones.

El jueves 22 tuvimos la suerte de poder charlar con Linkin Park minutos antes de subirse al escenario principal de Download Madrid, en el que presentaron su nuevo álbum, dejando el repaso generalizado de sus clásicos hacia el final de un show que fue in crescendo, pero que no resultó el mejor de la jornada. Galardón que podríamos otorgar a los vecinos galos de Gojira y a los norteamericanos A Day To Remember, así como a bandas nacionales como Porco Bravo, Jardín de la Croix o Virgen.

La jornada del viernes 23 arrancaba con mucho sabor nacional, ya que Hamlet y Somas Cure se llevaron la palma de largo, mientras que el respetable iba tomando posiciones para ver a Mastodon, líderes indiscutibles del día, que no dejaron respiro alguno a los allí presentes y colocaron el listón muy alto a los protagonistas de la noche; demasiado alto. Y así fue. No podemos obviar el impecable sonido de The Cult, la magia de Opeth y la contundencia de System Of a Down, pero tal vez la falta de cercanía con el público y la actitud de Serj Tankian nos mostró un concierto que, dejando el fanatismo a un lado, no estuvo a la altura de las espectativas. Pero, sin duda, se llevaron a la gente de calle.

Con los pies molidos, falta de sueño y con menos espectadores a nuestro alrededor, afrontábamos la jornada del sábado 24 con cierto aroma "revival". No sé si por la media de edad, que por suerte era superior a otros días, si por el cartel, o porque llegaban los nombres propios de toda una generación. Probablemente fuese el día más agradable, cómodo y sin altibajos en la calidad de los conciertos, en los que In Flames volvieron a mostrar el motivo por el que fueron galardonados como la mejor gira del año, con un sonido impecable y una elegante puesta en escena. Ministry no dejó títere con cabeza y Kvelertak desveló sus intenciones de pasar a ser referentes de la escena. Pero, sin duda, el término cabeza de cartel brilló con luz propia por primera vez en el festival con Prophets Of Rage. Una auténtica fiesta musical, en la que repasaron los himnos de Rage Against The Machine, sin olvidarse de Cypress Hill, Public Enemy, ofrecer la exclusiva del que será su primer trabajo y la magia de permitir cantar "Like a Stone" de Audioslave a todos los asistentes, en recuerdo de Chris Cornell, mientras unas leves gotas de lluvia acariciaban nuestros rostros.

En definitiva, la primera edición de Download Festival Madrid ha saciado y cumplido con éxito nuestro deseo de volver a tener en la capital una cita de calidad con el mejor rock y metal nacional e internacional. Nuestros mejores deseos para los años venideros, en los que esperamos seguir viendo tantas bandas españolas que miran de frente y sin complejos a nuestros compañeros europeos y americanos.



Diego Cardeña