Adrian Smith (Iron Maiden) desvela la curiosa historia de cómo la banda consiguió funcionar con tres guitarristas

Con el regreso de Smith a la banda en 1999, Janick Gers y Dave Murray tenían menos margen para tocar

Tiempo de lectura: 2’

En una nueva entrevista para My Planet Rocks (vía Blabbermouth.net), Adrian Smith, guitarrista de Iron Maiden ha recordado el momento en el que, en 1999, decidió volver a la banda -junto a Bruce Dickinson- para volver a llevar a cabo una nueva gira de la banda y grabar, además, un nuevo trabajo, que se acabaría llamando 'Brave New World' (2000). Pese al éxito que supuso que ambos integrantes regresaran al conjunto, los ingleses se encontraron con un grave problema: ahora tenían tres guitarristas, por primera vez en su historia, donde antes sólo había dos.

"Podría haber ido terriblemente mal, ¿verdad? Quiero decir, imaginate a tres Yngwies Malmsteen o a tres Ritchie Blackmores. No funcionaría", admite Smith. "Dave y yo nos llevamos desde hace muchísimo tiempo. La verdad es que pensé que Jan y yo tocaríamos la mitad de cada concierto cada uno o algo por el estilo. Sin embargo, Steve Harris tuvo una idea loca. Les sugirió que fuéramos tres guitarristas. Me gustaría haber estado presente cuando lo dijo. En cualquier caso, lo probamos".

"Fuimos a Portugal y comenzamos a compartir ideas en una especie de nave industrial. Era como un club de moteros, estaba lleno de motocicletas. Estábamos de pie, mirándonos los unos a los otros y alguien dijo: '¿Alguna idea?'. Yo contesté: 'Tengo un riff'. De ahí nació 'The Wicker Man'. Entonces comenzamos a tocar y simplemente encajamos. De ahí, seguimos adelante".

Lo cierto es que, lejos de enfadar a los fans, de que Iron Maiden comenzara a sonar peor o de que hubiera más luchas de egos, la banda comenzó un periodo de estabilidad que ha durado desde entonces hasta hoy, interpretando además, muchos de los clásicos que sonaban antes de que el tridente de guitarristas se hubiera formado.

"Funciona. Aunque resulte increíble, lo hace. Con nuestras canciones antiguas, hay muchas armonías, solos que se unen, riffs... quiero decir, hay mucho trabajo. Lo cierto es que todo este material funciona especialmente bien con tres guitarrista y, sobre todo, en directo".

No hay ninguna duda, y aunque pocos se lo esperasen, este trío de hachas ha acabado llevando a Iron Maiden a una segunda etapa de gloria. ¡Esperemos poder seguir disfrutando de ellos durante muchos más años!

RockFM