La bala del trágico asesinato de John Lennon busca nuevo dueño en subasta

Una reliquia de la historia musical cargada de un tétrico significado, y es que se conoce que habrá una subasta en la ciudad de Newcastle, se trata de una bala disparada por la pistola que truncó la vida del icónico músico de The Beatles, John Lennon.

El objeto es una auténtica reliquia dicho por todos los expertos y fue otorgado al agente de policía Brian Taylor por el departamento de policía de New York. Taylor en alguna que otra ocasión tuvo una oportunidad que muchos hubieran querido tener y es que disparó con la misma pistola que empleó Mark David Chapman. Taylor guardó la bala enmarcada junto a una fotografía del momento en que recibió el objeto, durante el resto de su vida.

La familia de Brian tomó una gran decisión y es que optaron por poner en subasta la bala mediante la casa de subastas Anderson & Garland. Según el director de esta, “Hay una base de fans de The Beatles que es muy fanática y un mercado para casi cualquier cosa de los The Beatles. Pero muy rara vez se consigue algo tan inusual y único, que es difícil saber lo que vale y si hay un mercado para ello o no. Es una pieza realmente interesante de los recuerdos de los Beatles que probablemente no pueda ser replicada”.

A lo largo de la historia se han planteado dudas sobre como fue el asesinato de John Lennon y como se consiguió esta bala. En el invierno de 1980 Mark David Chapman tenía 25 años, había abandonado su enésimo empleo, en más de dos ocasiones se había intentado suicidar y su matrimonio era insostenible, en general su vida era un autentico caos acrecentada por problemas de salud mental.

Mark David Chapman era un auténtico fan de The Beatles, pero últimamente no estaba contento con la letra de sus canciones. Llegó una gélida tarde de diciembre en la que John Lennon y su mujer, Yoko Ono salen de casa y en la calle les espera una limusina que los llevará a la grabación del próximo álbum de ella. Mark David Champan estaba en el portal, se acerca a John y le pide que le firme una copia de ‘Double Fantasy’, su último disco. John accede y le firma el disco, pero nunca se imaginaría que horas más tarde su vida acabaría. Eran ya las once de la noche y al regresar a casa cuatro balas impactaron sobre el artista desplomándose al suelo, le llevaron corriendo al hospital pero nada pudieron hacer por su vida.

La subasta de la bala del asesinato de John Lennon sigue siendo un recordatorio sombrío de la fragilidad de la vida y la perdurabilidad del legado del legendario músico. Aunque su vida fue truncada trágicamente, su música y su influencia continúan resonando en generaciones de fanáticos en todo el mundo, recordándonos que su legado trasciende cualquier objeto o acontecimiento oscuro.