Billie Joe Armstrong (Green Day) se abre sobre sus problemas con las sustancias: “Un cubo de basura humano"

El frontman de Green Day empezó a beber antes de los conciertos y poco a poco todo se le acabó yendo de las manos

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Puede que recuerdes cómo, en el iHeartRadio Fest de 2012, Billie Joe Armstrong se acabó bajando del escenario soltando improperios y con, digamos, no precisamente las mejores formas. Aunque este fue un mal momento para el artista, al menos le ayudó a buscar tratamiento para su evidente problema con el abuso de sustancias. Ahora, en una charla con el podcast WTF (vía Loudwire), Armstrong ha hablado sobre estas circunstancias y, sobre todo, de cómo un acto relativamente inocente, beber para no ponerse nervioso antes de los conciertos, se acabó convirtiendo en toda una espiral de autodestrucción.

"Tengo mucho miedo escénico", admite la cantante. "Es la anticipación de todo el día y prepararme para salir al escenario en un estadio y cosas así".

"Empecé creo que alrededor del disco después de 'Dookie', donde me ponía muy nervioso. Alrededor de 'Insomniac', empecé a beber más antes de los conciertos y pensaba: 'Hey, eso funciona. Voy a seguir haciéndolo", dice Armstrong. "Entonces empecé y me di cuenta de que también seguía bebiendo después de los conciertos. Simplemente sucedió".

"Solía fumar porros todo el tiempo, pero después de tener a nuestro primer hijo no podía estar colocado cerca de él. Pero el alcohol...", dijo Armstrong. "Tenía poco más de 20 años e intentaba hacer lo que otros chicos de mi edad intentaban hacer en aquella época, y entonces el alcohol se convirtió en un problema y empezó a patearme el culo".

Y eso significa que su personalidad comenzó a verse afectada: "Estoy bien durante unas copas y luego empieza a aparecer otro tío. No me enfado, pero me convierto en el tío borracho y pesado de todo el mundo. Puede llegar a ser muy divertido, pero luego no puedo desconectar. Estaré bebiendo hasta las cuatro de la mañana o así".

Pero el alcohol llamaba a otra clase de sustancias, las cuales derivaron en lo que Billie llama “momentos de cubo de basura humana”. Una vez que bebía, ya no podía parar.

Alrededor de 2010, la situación comenzó a ser cada vez más crítica: "Creo que algunas de mis acciones eran cada vez más alocadas. Públicamente había cosas que empezaban a pasar como si me despertara al día siguiente, como desmayos. Así que me enteraba y empezaba a sentir vergüenza, culpa, autocompasión y todas esas cosas divertidas", explicó el vocalista.

¿Estaban sus compañeros preocupados? Armstrong responde sin pelos en la lengua: “Pienso que un poco de vez en cuando de que pudiera hacerme daño. Pero les gusta la fiesta y no me voy a meter en su camino. Pero era como: '¿Por qué nos echan de este sitio?' 'Oh Billie está en la barra'".

Después de lo sucedido en 2012, Armstrong entró a rehabilitación y estuvo cinco años sobrio... hasta que decidió tomarse otra cerveza: Estuvo bien durante un tiempo, pero luego, de forma constante, vuelves a las andadas y ya soy mayor y me duele el cuerpo y me estaba haciendo más daño emocionalmente y más daño a mi familia", dice la cantante.

Tras volver a rehabilitación, Billie regresó a Green Day con toda su fuerza y, ahora, la banda se prepara para lanzar su nuevo disco, 'Saviors', este próximo viernes.

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