Dave Mustaine (Megadeth) y su etapa más dura en la música: "Venía de la quimioterapia y seguía trabajando"

Hablar de Megadeth en los últimos tiempos es sinónimo de ‘The Sick, the Dying... and the Dead!’, el álbum que más tiempo ha tardado en grabarse de todos los que ha elaborado la banda hasta la fecha... Y es que, el grupo entró en el estudio en mayo de 2019 y acabó saliendo a finales de 2021. Entre medias, una pandemia de coronavirus y varios problemas internos.

Precisamente, una de esas piedras en el camino que se encontró la banda fue el diagnóstico de cáncer de Dave Mustaine, que llegó justo un mes después de que la entraran en el estudio. Algo que produjo un hecho insólito, ya que gran parte del disco fue grabada durante el proceso médico que vivió Mustaine.

Sin embargo, el cáncer no fue ningún impedimento para Dave, que además escribió la canción más rápida de Megadeth hasta la fecha. Hablamos nada más y nada menos que de "Night Stalkers" que nos eriza la piel a 190 bpm. Un tema que, según el cerebro de Megadeth, era "necesaria".

Como estamos comentando, la enfermedad no supuso un impedimento para Mustaine, quien acudía a diario al estudio para seguir trajando en el proyecto. Así lo confesaba en declaraciones a Guitar World (vía UG), el guitarrista Kiko Loureiro, que también aprovechaba la ocasión para elogiar la perseverancia de su compañero:

“Podía ver que estaba cansado. Venía de la quimioterapia y seguía yendo a trabajar todos los días. Cuando le ves hacer esto, te dices: '¡Joder, sí, vamos a trabajar en este disco, tío! Fue muy inspirador verle llegar y coger su guitarra y no bajar el ritmo. Las canciones, el conjunto. Todo estaba ahí”

“Nada puede destruir a este tipo, ¿sabes? Nos decíamos: '¿Estás seguro de que quieres trabajar hoy? Si te vas a casa, todavía podemos trabajar en algunas cosas'. Y él siempre decía: 'De ninguna manera'. Él quería estar allí. Y ponía todo en las canciones”.

Por su parte, el propio Mustaine también recordó aquellos difíciles momentos en los que no recibió más que apoyo de sus compañeros de banda: “Fue genial trabajar con Kiko y [el batería] Dirk [Verbeuren] durante tres meses en Nashville en el verano de 2019 para convertir esas maquetas en canciones”.

“Llegaba al estudio y todos me recibían con abrazos, chocando los cinco y dando palmaditas en la espalda. Todo lo que recibía eran ánimos. Tocaba algo y era: 'Gran solo, Dave'. Sólo aliento, aliento, aliento. Y creo que además de hacer un gran disco, hemos hecho una gran banda”.