Habla el policía que paró el último concierto de The Beatles: “Estaban alterando el orden público"

El agente de policía que puso punto final al concierto en la azotea de Savile Row rompe su silencio

Tiempo de lectura: 2’

El agente de policía que acabó con la última actuación de The Beatles el 30 de enero de 1969 ha roto su silencio y dice estar contento con cómo lidió con la situación. (vía Ulimate Classic Rock)

Su nombre es Ray Shayler, que tan solo tenía 25 años -y llevaba tres de servicio- cuando dirigió a un grupo de cuatro policías para investigar ante el chivatazo de que había disturbios en Savile Row, más concretamente en la azotea del cuartel general de The Beatles en Londres. Las imágenes de este emblemático -¿e ilegal?- momento pueden verse en la película 'Let It Be' (1970) de Michael Lindsay-Hogg y, por supuesto, en el nuevo documental sobre la banda que dirige Peter Jackson, 'Get Back', que ya puedes ver en Disney+.





Cuando Lindasy-Hogg grabó las imágenes que aparecen ahora en ambos films se esperaba presencia policial e instaló un espejo bidireccional en el vestíbulo del edificio para seguir los procedimientos. Algunos de los operadores de cámara de la azotea de Apple Corps también habían recibido instrucciones de filmar a los agentes en acción.

“No diría que era un fan”, confiesa ahora Shayler al Daily Mail. “No me gustaban demasiado The Beatles cuando se convirtieron un poco en Hare Krishna, pero teníamos algunas grabaciones y LP's en casa. Me gustaba su música. Pero, cuando me subí al tejado, tenía un trabajo que hacer y pensé: 'Bueno, tenemos que intentar parar esto'”.

Cuando llegó, Shayler recuerda que “los miembros de la banda nos miraron y siguieron con lo que estaban haciendo”. El agente habló con el road manager de The Beatles, Mal Evans, diciéndole “que, aunque apreciaba lo que estaban haciendo, no podía seguir sucediendo porque estaban alterando el orden público”.

Shayler le preguntó a Evans “durante cuánto tiempo iban a seguir”. Y él le contestó: “Una grabación más”. El agente, entonces, dijo: “Bueno, ya que te cuelgan por oveja, que lo hagan por cordero. Seguid con esa canción y luego lo paramos. Fue una discusión, pero nunca llegó a escalar”.

Cada Beatle reaccionó de forma distinta meintras se marchaba tras acabar la actuación:

“George Harrison y John Lennon no nos hablaron, pero por un motivo”, afirma. “Hacía poco les habían pillado con cannabis o algo así y estaban bajo fianza. Había salido en los periódicos. Paul McCartney fue pidió disculpas sobre el concierto y Ringo Starr bromeó diciendo: '¡No me pongáis las esposas!'”.

Ahora Shayler, que tiene 77 años, recuerda que hizo de poli bueno en aquel momento: “Ni siquiera lo apunté para que quedase constancia”. El policía, a la larga, está contento con cómo lo hizo. “No creo que lo hiciera mal por la forma en la que manejé la situación, pero salgo un poco severo. Yo creo que es por el casco”.

“Alguien me preguntó cómo me sentía al ser el hombre que paró el último concierto de The Beatles, pero yo creo que eso no es verdad”, añade Shayler. “No paré a The Beatles, sugerí, sutilmente, que sería buena idea si no seguían. Si la banda se hubiera puesto insolente o se hubiera negado a parar, las cosas hubieran sido distintas. Pero esa no era la forma en la que trabajábamos entonces, yo siempre intentaba resolver los problemas sin arrestar a nadie”.

RockFM