Ian Anderson (Jethro Tull), sincero sobre el 'Dark Side of the Moon' de Roger Waters: “No es por venganza"

Ian Anderson, líder de Jethro Tull, ha hablado sobre Roger Waters y su decisión de volver a grabar el emblemático 'The Dark Side of the Moon' de Pink Floyd.

Con muchos a favor y otros tantos en contra, Waters, que se sigue llevando muy mal con su ex-compañero de banda David Gilmour, ha decidido volver a grabar el disco desde cero, añadiéndole otra canción y reimaginando algunas de ellas. Para Waters, el mensaje original del álbum no caló en su momento y ahora, con “la sabiduría de alguien de 80 años”, quiere intentar volverlo a lanzar.

Sea como fuere, en una nueva charla con Classic Album Review (vía Ultimate Guitar), Anderson ha hablado sobre el nuevo proyecto de Waters y sobre, si, en realidad, todo esto es un plan para molestar a sus antiguos compañeros o, por el contrario, las intenciones de Roger son solamente expresivas.

"Bueno, estoy seguro de que hay un poco de ambas cosas, en realidad. Pero sin duda le daría a Roger Waters el mérito, artísticamente, de hacerlo porque pensó que iba a aportar algo nuevo a lo que ya es una fiesta popular y muy concurrida que forma parte de la gran historia de la música rock”.

"Así que estoy seguro de que no lo haría sólo para vengarse de algún modo de los antiguos miembros de la banda y conseguir todo el dinero para él esta vez...”.

Sobre el arte y la expresión, Anderson sabe un par de cosas. Hablando sobre las metáforas en la música, Ian fue preguntado sobre cómo estos recursos pueden ser interpretados a niveles distintos.

"De eso se trata, de metáforas, de las herramientas del oficio. ¿Qué sería de un buen compositor sin algunas buenas metáforas? Porque es una delicia”.

"Quiero decir, no tengo ni idea de lo que debe ser intentar escribir canciones en otro idioma, pero hemos sido bendecidos con un lenguaje muy rico. Y por el amor de Dios, ¡intentemos utilizarlo! Utilicemos esta gran baza que tenemos en la lengua inglesa para intentar ser un poco más divertidos y, al mismo tiempo, ser un poco inteligentes con lo que escribimos”.

"Como escritor, me produce una gran satisfacción utilizar las herramientas del oficio. Y al menos debería traducirse un poco en lo que creo que otras personas apreciarán, en algún nivel, incluso si no es necesariamente profundamente escudriñado, sino que es una sensación en las letras, una sensación en las palabras, una sensación en la música que se imparte a sí misma en primer lugar, pero también hay otras capas en la cebolla que puedes desvelar suavemente y ver qué asquerosidad hay justo en el medio".

Anderson, también, hizo un paralelismo con Stephen King, autor al que, según él, se ha infravalorado por dedicarse al género del terror y por ser demasiado prolífico:

"Pero cuando lees a Stephen King, te das cuenta de que no sólo es un escritor prolífico, no sólo es alguien que puede escribir ficción popular y extremadamente popular, sino que en casi todos los libros que he leído de Stephen King, hay una moraleja”.

"Y habla de la gente, habla de la bondad innata, de la maldad, de las complejidades de todo, de los dilemas... realmente plantea muchas preguntas en su forma de escribir, pero todo en el contexto de la ficción popular. La gente que se emociona leyendo cosas que dan miedo, o cosas raras, disfrutará también a ese nivel".