El Kurt que nunca conocimos, al desnudo

Era la primera vez que Nirvana tocaban para más de dos mil personas en Los Angeles, su álbum 'Nevermind' acababa de salir tres semanas antes y todo apuntaba a que sería “The next big thing”, por eso el jefe de Geffen había invitado a Axl Rose al evento. Cuando acabó, Axl pidió conocer en persona a Cobain, pero este último no quería por todo lo que Rose representaba. Tan sólo bastó una mirada de Kurt a su mánager para que éste supiera qué hacer. Este es el ejemplo perfecto para entender el grado de confianza e intimidad que alcanzaron Danny Goldberg y Kurt Cobain durante su breve, pero intensa relación.

Los ríos de tinta que ya han caído (y caerán ) sobre vida, obra y milagros de Kurt Cobain son infinitos. De esta manera, hemos leído biografías escrupulosamente documentadas como la brillante “Heavier than Heaven” de Charles R.Cross, otras oficiales y autorizadas por el mismo Kurt como “Come As You Are” de Michael Azerrad o incluso historias orales de lo más completas como “Ahora Todo el Mundo Adora Nuestra Ciudad” de Mark Yarm, pero nunca, hasta ahora, habíamos disfrutado de una visión tan íntima y delicada del artista como la que ofrece Danny Goldberg en “Serving the Servant. ”

Las historias que Danny narra sobre cómo conoció a Kurt, cómo llegó a trabajar con él y de qué manera se ganó su confianza, contribuyen a humanizar la tantas veces idealizada figura de Cobain. Historias que habíamos escuchado como las peleas con Axl Rose, sus diferencias con Eddie Vedder de Pearl Jam, su lucha por salir de las drogas o el martirio que le provocaba mantener un equilibrio entre el underground y el mainstream tienen, bajo la perspectiva de Goldberg, una visión totalmente lógica que se mantiene al margen del “divismo” alternativo al que tantas veces se le ha querido acusar a Kurt. Totalmente imprescindible para entender una de las personalidades más intensas y excitantes de los últimos años.