Lars Ulrich estuvo a punto de ser el cantante de Metallica

Antes de ser el batería de Metallica, Lars Ulrich se posicionaba para cantar 

Tiempo de lectura: 2’

¿Te imaginas cómo sería tener a Lars Ulrich de cantante de Metallica? Estuvo a punto de suceder en 1981 y podría haber cambiado la historia de la formación para siempre. Y es que el bueno de Lars, desde los comienzos de la historia de la banda, siempre ha sido uno de sus activos más visibles y, junto a James Hetfield, el co-fundador del conjunto. 

Según el mánager original de la banda, Jon Zazula, antes de grabar su debut, 'Kill 'Em All', Lars planeó ser la voz principal de Metallica. ¿Por qué? Pues porque, aparentemente, la presión de ser vocalista principal era demasiada para James Hetfield, que se ponía de los nervios a la hora de cantar. En cierto momento, entre todos, se propuso la idea de que Ulrich diera un paso al frente. 

“Lars y yo planeamos muchas cosas”, explicó a la Metal Hammert en 2016. “Porque James no era, precisamente, el cantante con más confianza del mundo. No creo que se sintiera cómodo. En cierto momento hablamos sobre la posiblidad de que Lars se convirtiera en el cantante de la banda. Bueno, durante unos segundos”, siguió. 

Sin embargo, esta no fue la primera vez que James estuvo a punto de retirarse del conjunto. Y es que, una vez más, poco antes de que el primer álbum del grupo, Hetfield volvió a querer abandonar su puesto. John Bush, vocalista de Armored Saint, fue la persona a la que propusieron para hacer las veces de cantante. 

“En aquel momento, James todavía no estaba seguro sobre si quería ser cantante”, explicó el vocalista. “Armored Saint comenzaba a triunfar en el circuito de clubes de Los Ángeles y todos eramos amigos, muy amigos”, siguió. 

“Metallica estaba haciéndolo muy bien también, pero no creo que nadie pensara que yo iba a ir a cantar con ellos. Dejar la banda en la que estaban mis amigos para unirme a otra no tenía sentido para mí. No quería hacerlo. Eso sí, estuve agradecido y honrado, pero, como digo siempre, yo no estaba destinado a estar en Metallica. No era mi porvenir”, finalizó. 

Sea como fuere, por suerte, James Hetfield encontró la confianza suficiente como para seguir adelante y convertirse en uno de los cantantes más icónicos de la historia del rock. Quizás, si se hubiera retirado, el destino de la banda hubiese sido uno muy distinto. 

RockFM