Paul McCartney, aterrorizado de “matar a una anciana” con el estreno de “Live and Let Die”: “Tenía 90 años"

El estreno de uno de los temas más conocidos del Beatle fue, cuanto menos, angustioso

Tiempo de lectura: 2’

Cuando Paul McCartney estrenó su emblemática canción “Live and Let Die”, el Beatle temió por la vida de una de sus fans, una anciana de 90 años a la que pensaba que “iba a matar”.

Cuando, en 1973, el Beatle compuso el tema que aparecería en una película de James Bond, la primera protagonizada por Sir Roger Moore, comenzó a presentar la canción en directo con pirotecnia y llamas. Sin embargo, ahora Paul recuerda que esta imponente producción le provocó el temor de matar a “una señora de 90 años que había en la primera fila”. El artista, literalmente, tenía miedo de darle un susto de muerte, aunque, afortunadamente, aquello acabó por no ocurrir. De hecho, a la anciana “le encantó” el espectáculo.

Así lo narra McCartney en su podcast “A Life In Lyrics” (vía Ultimate Classic Rock): "Era una gran canción para nosotros. Teníamos pirotecnia y podía llegar a hacer un poco de calor ahí arriba. Cuando sabíamos que se iban a producir las explosiones, miramos a la gente de la primera fila y entonces "boom". Era genial ver cómo se miraban unos a otros y se quedaban pasmados".

"Al principio, cuando la tocábamos, había una explosión. En una ocasión, cuando la empezamos, me di cuenta de que había una mujer de 90 años, muy mayor, en primera fila. De repente me digo: 'Oh mierda, vamos a matarla'. No podía parar la canción y decirle: 'Tápate los oídos, amor'. Miro hacia otro lado y 'boom'. Luego vuelvo a mirarla y le está encantando".

El artista de 81 años está, ahora, orgulloso de que su canción haya seguido perviviendo tantos años después: "Siempre tuve la ambición de escribir una canción de Bond porque, en cierto modo, me gusta verme a mí mismo, una parte de mí, como un compositor currante. Si necesitas una canción para la boda de la reina, soy tu hombre”.

"El equivalente de eso para mucha gente es la canción Bond. Si has compuesto una canción para una película de Bond, es como un premio”.

"En este caso, el tipo de nuestra discográfico, que se encargaba de Apple Records de los Beatles, conocía a alguien relacionado con la franquicia Bond. Un día estábamos charlando y nos dijo: 'No te interesa hacer una película de Bond, ¿verdad?' 'Sí, probablemente me interesaría', no quería parecer demasiado entusiasmado. 'Sí, claro, lo haré'".

RockFM