Tras 7 horas esperando para ver a Paul McCartney en primera fila se desmaya: “Al borde de la hipotermia"

El concierto de Paul McCartney en Glastonbury 2022 fue especial por muchos motivos, pero una de las cosas que sucedió y que puede que no sepas es que el ex-Beatle se vio obligado a parar su concierto a mitad del set al percatarse de que una fan de había desmayado entre el público. (vía NME)

Fue el pasado 25 de junio cuando McCartney hizo de cabeza de cartel del evento, en el que también aparecieron Bruce Springsteen y Dave Grohl. Sin embargo, esta fan no pudo disfrutar del concierto a raíz de su desmayo y ahora afirma estar “destrozada” por habérselo perdido.

Su nombre es Lisa Morris y llevaba horas y horas esperando en las primeras filas para poder ver a su artista favorito lo más cerca posible. Pero ya sabes cómo son los festivales. Si decides ver a un grupo en primera fila, puede que te encuentres en medio de una marea humana con todas las consecuencias que eso conlleva.

Para Morris eso fue más o menos lo que pasó. La nativa de Bath comenzó a sentirse mal al poco de llegar McCartney al escenario. Pese a todo, aguantó 25 minutos de concierto antes de desmayarse y de tener que ser trasladada a una carpa médica por el equipo de seguridad.

Paul estaba contando una historia sobre Jimi Hendrix cuando, de repente, se percató de lo que estaba pasando y dijo: “¿Qué está pasando ahí? Algo pasa en el medio de la gente. Que alguien la atienda”.

Una vez vio que todo estaba bien, Paul se lo tomó con humor y bromeó diciendo: “No será por ese solo que he tocado, ¿no?”.

Ahora, la fanática afirma que le ha roto el corazón no poder ver al que considera su héroe en directo.

“A las cinco o seis canciones se acabó, estaba fuera de juego”, recuerda sobre el momento en el que se desmayó, explicando que “se puso a llorar” una vez se dio cuenta de lo que había pasado. Esta habitual del festival explica que llevaba “meses y meses y meses” emocionándose con la idea de ver al ex-Beatle.

Su marido ha sido, recientemente, diagnosticado con cáncer de intestino, significando eso que no podía ir al festival este año. “Ver a Paul McCartney era mi meta y me ha hecho seguir adelante durante todo este tiempo horrible en casa. Llegar a primera fila era mi mayor meta”, admite.

Siete horas en la barrera de la primera fila lograron que cumpliera lo que quería, pero su cuerpo se rindió antes de tiempo. No en vano, los médicos le dijeron que estaba “al borde de la hipotermia”:

Cuando se dio cuenta de que no podría ver el resto del concierto de McCartney, Morris admite que se puso a llorar: “Mi canción favorita estaba sonando”.

Morris también dijo que se sentía "absolutamente ridícula", añadiendo: "¿Por qué me quedé allí? Soy enfermera, debería saberlo". Ahora espera poder ver a McCartney en directo en el futuro: "Espero que si vuelve a hacer una gira pueda conseguir una entrada. Esa es mi única esperanza".

¡Ojalá Paul escuche su historia e invite a Morris a conocerle!