LIBROS DEL ROCK

La explosión del punk británico que vivió Chrissie Hynde

La líder de Pretenders vivió en primera persona el nacimiento del punk y lo contó en el libro “A Todo Riesgo: Memorias Airadas de una Pretender”. 

 

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Locutor RockFM

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Cuando tenía doce años, Chrissie Hynde hizo un poema sobre su palabra favorita. Y esa palabra era Inglaterra. Porque, aunque la líder de Pretenders nació en Ohio, sus ídolos musicales estaban al otro lado del charco. Por eso, en 1973 decidió irse a la Londres y allí trabajó en New Musical Express y en SEX, la tienda de ropa de Malcolm McLaren, poco antes de que el polémico mánager dirigiera desde la sombra a los Sex Pistols.

Pero antes de todo eso, Chrissie estudió Bellas Artes en la Universidad de Kent y fue testigo de la masacre que inmortalizó Neil Young con su canción “Ohio”, después de que cuatro estudiantes fueran asesinados por la Guardia Nacional, en medio de una protesta contra la Guerra de Vietnam. Mientras acababa sus estudios, Chrissie tuvo varios trabajos para, entre otras cosas, poder pagarse su viaje a Inglaterra. En 1973 consiguió trabajo en un estudio de arquitectura de Londres y ocho meses después empezó a trabajar como redactora del NME y como dependienta de la tienda SEX, hasta que la despidieron, tras tener una bronca con un cliente. Así, Christine Ellen intentó montar una banda en Francia hasta dos veces, previo paso por Cleveland, antes de volver a Londres en un momento clave: en pleno boom del punk del 77.

Mick Jones y The Dammed
En 1976, todos los amigos de Londres de Chrissie Hynde tenían una banda y por ello su obsesión por tocar en un grupo como ellos le hicieron probar con Mick Jones antes de que se formaran The Clash y con Masters of the Backside. Esta banda fue una creación de Malcolm McLaren, que quería un grupo que sonara como los Ramones, a los que había visto en el CBGB. Pero dentro de Masters of the Backside estaban los futuros fundadores de The Damned y muy a su pesar ellos pidieron a Chrissie que se fuera.

Steve Strange y el batería de Motörhead
Después de ser rechazada como guitarrista, Chrissie Hynde se sentía una perdedora hasta que en 1978 fue fichada por The Moors Murderers con Steve Strange (futuro cantante de los nuevos románticos Visage). Pero el nombre del grupo hizo que su nueva guitarrista no se sintiera muy identificada con él, ya que hacía referencia a Ian Brady y Myra Hindley (unos tristemente célebres asesinos de niños), y quizás por eso, Chrissie decidió grabar sus propias maquetas para montar un grupo en la que ella llevara la voz cantante. Esas maquetas llegaron a Real Records, y su propietario –Dave Hill– alquiló un local de ensayo, donde Chrissie terminó sus canciones con Steve Strange al bajo y con Phil Taylor de Motörhead a la batería.

Los Pretenders y el cantante de Motörhead
En sus memorias, Chrissie Hynde reconoce que aún a finales de los setenta todos eran muy inocentes, a la hora de fumar “de todo” y de meterse “cualquier cosa”. Por eso, Chrissie considera “un milagro” que siga viva para contarlo. En su libro, la cantante cuenta sus experiencias con todo lujo detalles, incluyendo su primera vez o incluso cómo fue víctima de una violación. Pero en su vida no todo fue sufrimiento y dolor. De hecho, en Akron, en su ciudad natal, llegó a telonear a Cream con uno de sus primeros grupos y coincidió fugazmente con Ray Davies de los Kinks, muchos años antes de que se casara con él. Aunque fue gracias a otra de sus célebres parejas como conoció a los que luego serían sus compañeros en los primeros Pretenders… Y es que Chrissie fue novia de Lemmy Kilmister de Motörhead y con él arrancó la historia de los Pretenders.

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