Recordamos al Rey del Rock and Roll... Mr. Little Richard!

Poner etiquetas del estilo de 'aquel o tal artista es el Rey del Rock and roll' puede ser bastante discutible. ¿Con quién nos quedaríamos? Al menos para mi está claro que el Rey es Little Richard. Pero el ser negro en un país en el que la segragación racial era una lamentable realidad, no le ayudó a ser tan popular como los artistas blancos que triunfaron en su época. Aún así, Little Richard ha dejado su huella en prácticamente todos los grandes artistas del rock.

Fue tal la influencia de Richard que músicos como Jimi Hendrix o Billy Preston formaron parte de la banda de Little Richard. En el caso de Hendrix, el gutiarrista fue despedido, al parecer, porque sobre el escenario solo había espacio para una estrella... Y no era Jimi. Y es que, seguramente, Little Richard sea la primera gran estrella del rock and roll, tal y como conocemos hoy día el concepto: tenía un perfecto sentido del espectáculo, sabía como entretener al público, tenía talento y una voz inimitable.

Todo esto le vino a Little Richard desde pequeño. Por un lado por su propia forma de ser y, por otra, por el hambre de triunfar y dejar atrás su pueblo natal (Macon, Georgia). En lo personal, Richard fue muy maltratado por su padre, quien no soportaba que su hijo usara maquillaje y se vistiera con ropas de mujer. En ese sentido, Richard recuerda cómo su padre llegó a atarle a la cama de pies y manos y pegarle y hacerle cortes con una navaja de afeitar. Ese fue el momento en que un joven Richard, de tan solo 13 años, se escapara de casa. Y, afortunadamente, esa decisión le llevó a ser acogido por una pareja de blancos que regentaban un bar en Macon, donde Richard se sintió aceptado y empezó a ofrecer sus primeras actuaciones.

Una de sus grandes canciones, "Tutti Frutti", surgió mientras trabajaba como friegaplatos en la estación de autobuses de Macon. Y aunque los versos originales de la canción eran bastante más explícitas (sexualmente hablando), supo que aquella idea era su billete de salida. Finalmente lo grabó, aunque la discográfica le pidió que modificara la letra para poder publicar la canción.

Llittle Richard fue tan grande que incluso cuando no estaba en condiciones de tocar en directo, salía y lo hacía bien... Bueno, durante un tiempo lo hizo su amigo James Brown, con quien compartía mánager y quien le imitaba tan bien, que el público no notaba la diferencia. Por esto, y mucho más, recordamos a todo un revolucionario de las artes. Y, tal y como dijo Muhammad Ali, rendimos homenaje al auténtico Rey del rock and roll.