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De todos los cantantes de rock y el heavy metal, nadie duda de que Ronnie James Dio fue el más grande de todos.
A pesar de sus inicios en un grupo de doo wop llamado "Ronnie and the red caps" y "Ronnie Dio & The Prophets" su éxito mundial le llegó en 1975 cuando él y tres de sus compañeros de banda de aquél entonces, llamado "Elf" fueron llamados por un guitarrista de la talla de Ritchie Blackmore para formar Rainbow.
Blackmore y Dio trabajaron en perfecta armonía, creando discos que son historia del rock como Ritchie Blackmore's Rainbow, On Stage y Long Live Rock and Roll creando un estilo que más tarde se llamaría a modo de broma como 'Castle Rock' con sus relatos míticos de caballeros con espada, magos y castillos.
Poco más tarde, Dio volvió a sorprender a todos cuando se unió a Black Sabbath reemplazando al "despedido" Ozzy Osbourne. Un relevo que los fans más acérrimos de la banda no tomaron con entusiasmo en un principio, pero Dio, como era de esperar, no se dejó intimidar. Con Heaven And Hell consiguió rejuvenecer de nuevo a la banda y que, como ocurrió con Blackmore, fue un fenómeno que no duró. Fue cuando decidió formar una nueva banda eso sí, bajo su nombre y prestigio: había nacido DIO.
Desde su debut con Holy Diver en 1983 y los nueve álbumes siguientes hasta su triste pérdida en 2010, dejó su impronta musical y personal en el mundo del rock. Amado y querido por todos, no podíamos dejar de dedicarle un Decálogo de Mariskal completo en los días en los que hubiera cumplido 79 años.
Disfruta de su legado en #EDDMDio este miércoles a partir de las 23:59 en RockFM
