El Francotirarock y cómo sobrevivir a los grupos de Whatsapp

Álex Clavero hace un recorrido por las experiencias absurdas y frustrantes de los chats grupales

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Álex Clavero ha compartido varias reflexiones sobre los grupos de WhatsApp en las que mezcla humor y realidad. Estas reflexiones no solo arrancan carcajadas, sino que también revelan una crítica aguda sobre el uso excesivo y, en ocasiones, innecesario de estas plataformas de comunicación.

Para Clavero, los grupos de WhatsApp son una fuente constante de molestias y situaciones absurdas. En una ocasión, relató una historia que le contó Kutxi Romero, el cantante de Marea, con la que se siente profundamente identificado. Kutxi, recién iniciado en el mundo de WhatsApp gracias a su mujer, experimentó el caos desde el primer momento: “Me contó que su mujer le hizo WhatsApp, dejó el móvil al lado, se puso a leer y le empieza a sonar: Pi, pi, pi, pi, pi… Y dice, ¿qué pasa? Y le dice su mujer que te están mandando WhatsApp… y le dice Kutxi, eso es imposible, ¡si todavía no se lo he dado a nadie! Y le dice la mujer, le sale automáticamente a la gente… Y dice él, ¿pero a quiénes? – ¡Coño a toda tu agenda! No va a salirle solo a los que te caen bien! ¡Si fuera así le saldría a todos menos a Loquillo!”.

Clavero también destaca la utilidad de los grupos para el trabajo o para planificar actividades, pero critica duramente los grupos permanentes que parecen no tener un propósito claro. “Los grupos son muy útiles para un curro o un plan y luego fuera… Pero los grupos permanentes… Eso de estar ahí en un grupo en el que no habla nadie hasta que un día por la mañana dice uno: Felicidades Carlos… Y todos, felicidades, happy birthday, disfruta… Mirando qué frase no le han dicho a Carlos para ser original… Y al final del día le digo a un colega, pues Carlos no ha dado las gracias… digo a que no es su cumpleaños? Miramos y no había ningún Carlos!!!”.

Otro grupo que recibe críticas es el famoso grupo de padres del colegio. Clavero comenta sobre el temor y la incomodidad que estos grupos pueden generar. “Yo no he llegado a ese nivel pero recuerdo un espectáculo en el teatro en el que en un sketch tenías que decir algo peor que lo anterior: Que te metan en la cárcel, y la que me daba el pie decía: ¡Peor! Que te asesinen! Peor!!! Y yo: ¡Que te metan en el grupo de padres y madres del colegio! Y el teatro se venía abajo!!!”. Esta exageración pone de manifiesto el estrés y la presión social que pueden surgir en estos grupos, donde a menudo las discusiones y decisiones triviales se convierten en motivos de tensión.

En el ámbito laboral, la dinámica de los grupos de WhatsApp se vuelve aún más complicada. Clavero describe cómo estos grupos pueden generar desconfianza y la necesidad de crear grupos paralelos para hablar sin la presencia del jefe: “El grupo con los compañeros de trabajo... en el que también está el jefe… Eso te genera otro grupo paralelo para hablar de ello… Has visto que está este? Y yo no digo nada hasta que por cumplir digo: Debería irse el gilipollas. Y al día siguiente el que te vas eres tú! Y antes de que pongas: ‘el jefe abandonó el grupo’ Él pondrá en el grupo: ¡Clavero abandonó la empresa!”.

Finalmente, Clavero expresa su frustración con la función de borrar mensajes en WhatsApp, que puede convertirse en una fuente de ansiedad: “Cuando pones una gilipollez que no tiene gracia… Borrar para mí o borrar para todos… Para mí, que no me apetece ver la gilipollez que he puesto mientras los demás están comentando en un grupo paralelo lo subnormal que soy!”.


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