El Francotirarock y lo que los empleados del Ikea no te cuentan

De Ikea se sale y, en el caso de Álex Clavero, con lecciones aprendidas de vital importancia para desenvolverse bien en este espacio dedicado al hogar. Un ejemplo son los atajos. “Esto está bien saberlo, porque hay veces que dices, me toca hacer noche… ¡Que no será por camas!”, dice el cómico pucelano. Como esto ya le ha pasado más de una vez, ha aprendido a sobrevivir: “Yo entro con comida por si acaso…¡Indiana Jones no pasó de las cocinas!! ¡Yo he visto un peregrino del Camino de Santiago sentado en una mesilla!”. También asegura que ha visto a Frodo, el personaje de ‘El Señor de los Anillos’ y le ha dicho que se le había pasado de moda el anillo. Lo mejor de todo fue la anécdota que le ocurrió aquel día que se quedó encerrado en Ikea: “Estaba tan desorientado que vi un baño, entré y me puse a llorar… Entró un trabajador y me dijo… ¿Qué te pasa? ¡Esto es un scape room!!! No, no, ¡Esto es un bathroom! Si quieres te vendo un bote para el cepillo de dientes…”.

Otra cosa que nos ha descubierto el bueno de Álex Clavero es que si pides pañales te los dan gratis. “En los baños familiares… ¡Si ves que tu abuelo va mucho al Ikea lo mismo no es por los lápices!”, espeta el Francotirarock. Y si alguna vez te has planteado coger las muestras, no lo hagas porque en la caja te pueden decir que tienes que volverlo a dejar donde lo has cogido. “Donde los has cogido… Eso está a una distancia que si lo que te has llevado es una bombona de oxígeno de una persona… ¡Hasta que los hermanos vuelvan!! ¡Primos ya que les den por culo!”, exclama el cómico.