¡Selfie & Roll contesta a tu odio en Internet!

Seguimos atrincherados en los estudios de RockFM después de 15 días. Parece mentira que nos hayan dejado grabar más capítulos de esta aventura sonora, pero, por lo visto, nadie se ha dado cuenta del desastre que somos aún. Hasta que nos echen de la radio a patadas, Anna Moher y Javier Hualde volvemos a traerte otro capítulo de Selfie & Roll. 

¿De qué hablaremos hoy? Pues, primero, Javi contará su experiencia en la entrega del disco de oro de Marea. Mientras todo el mundo recibía sus galardones, el bueno de Hualde casi se queda sin rodillas ni pies. Menudo desastre de ser humano. Por otro lado, también hablaremos de una experiencia que muchos hemos tenido que vivir, ser obligados a acudir a un concierto de un grupo emergente. Que sí, que lo sabemos, que hay que apoyar a las nuevas bandas, pero, madre mía, ¿nadie se ha dado cuenta de que la gente que va es siempre la misma? 

• Los padres de la gente del grupo vestidos como si fueran a la gala de los Oscar cuando están en un garito de mala muerte. No falla, les podrás distinguir porque destacan porque relucen en la oscuridad del antro. 
• Los amigos que vienen a ver al grupo. Ya les han visto tantas veces que lo del concierto, en realidad, es lo de menos. Vienen a emborracharse y por la fiesta de después. Si toca un grupo a continuación, no les verás el pelo. 
• El señor mayor embriagado y melancólico que, cuando acaba el show, se acerca a la banda para decirles lo buenos que son. A veces les compra un disco que acaba en paradero desconocido. Se calcula que, en realidad, lleva 10.000 euros invertidos en discos que no escuchará jamás. 
• Los que vienen a liarla. Da igual que haya cuatro personas en toda la sala, van a intentar montar un pogo y, si es posible, romperán algo del mobiliario. Llevan el rock en la sangre aunque no escuchen música en ningún momento. 
• La banda. Llevan gafas de sol por la noche y se piensan que están actuando en Woodstock. Llegarán con aires de grandeza y te mirarán por encima del hombro aunque seas su amigo de toda la vida. Tienes que entenderles, van a palmar pasta y tienen 30 minutos para creerse que son Axl Rose. Cuando acaba el concierto, sus padres se llevan los instrumentos a casa, da igual que ya tengan 36 años. 

También hablaremos de Tye Trujillo, el hijo del bajista de Metallica, que es lo más parecido a uno de estos niños japoneses que ves en Youtube y que lo hacen todo, todo, mejor que tú. Sí, incluso caerse en el escenario. ¿Nos gustaría ser él? Sí ¿Nos deprime que con 15 años haya llegado más lejos que nosotros en toda nuestra vida? También. 

Por último, pero no menos importante, vamos a leer algunos de los comentarios de odio más divertidos que nos hemos encontrado en las redes de RockFM. Porque sí, los haters tienen un lugar en nuestro corazón y por eso, os vamos a devolver vuestro odio en forma de más odio. Os queremos y os odiamos al mismo tiempo. 

Pero bueno, ¿y la música? Pues podrás escuchar a Rise of the Northstar, La Raíz, Whisky Caravan o  The Bastard Suns. Un popurrí de lo más interesante que, al menos, sabemos que te va a molar. ¿Has llegado hasta aquí? ¿De verdad no tienes nada mejor que hacer? Pues, en ese caso, venga, ¡dale al play!