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El Francotirarock y cuando robó una toalla en una piscina

La experiencia de llevar a un niño a la piscina es difícil de olvidar para un padre o madre. Hay un torbellino de gritos, personas y materiales y es difícil mantener la calma. “Allí lo que más se lleva es el trampolín y el Lexatín… Llegas corriendo, desvistes a la pequeñaja, pon el bañador, toalla, gorro, gafas, chanclas… Que siempre te falta algo… Ha habido veces que la he metido en el agua, ¡Las gafas eran de ver y el gorro de Bacardí! ¡El tibu Ron blanco!”, bromea el Francotirarock.

En los vestuarios la cosa no es muy diferente y allí es fácil que sucedan cosas como un robo involuntario. Es lo que le pasó a Clavero y no dio crédito a la reacción de la señora que le increpó: “Salgo corriendo para la piscina y viene una tía por el pasillo señalándome… Digo, me ha conocido… Que lo mismo no es lugar para hacernos una foto pero yo me la hago… Me pone el índice a un palmo de la cara, todo el mundo mirando, y me dice…Tú, ¡Me has robado la toalla de la niña!”. Mientras Clavero ya se estaba retocando el pelo para salir bien en la foto pero se quedó paralizado con la actitud de la señora.


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