El Francotirarock y una de chistes infantiles

Los chistes infantiles despiertan la risa y la alegría en los niños, pero su valor va más allá de la simple diversión. Nuestro cómico tiene una hija de cuatro años que se llama Adriana y parece que va a seguir los pasos del padre por las bromas que ya está haciendo a su edad. “¿Te sabes el chiste del Pocoyo? ¡Tampoco yo! Porque el chiste está ahí… si ves un autobús que es un conejo, cómo se llamaría, ¿Eh? ¡El autobús Bunny! ¿Pero vosotros acaso sabéis cómo se llama el indio que va en moto? No? ¡Pues se llama El Mo-toro Sentado!”, cuenta el Francotirarock.

Los chistes infantiles tienen un impacto significativo en el desarrollo emocional de los niños. La risa que generan estimula la liberación de endorfinas, hormonas relacionadas con la felicidad y el bienestar. Esta risa les ayuda a experimentar emociones positivas y a desarrollar un sentido de alegría. Además, los chistes pueden aliviar el estrés y la tensión, ayudando a los niños a manejar las situaciones difíciles de una manera más saludable.

“¡Este año estábamos en Bilbao actuando y a Adriana le fuimos enseñando palabras en euskera! Le enseñamos a dar las gracias, se dice Eskerrik asko… Y el lunes cuando llegamos a casa le dice a su madre: ¿Sabes qué te dice un vasco cuando le das un tomate pequeño? ¡Es cherri casco! Porque nos encanta hacer el payaso… ¿Y sabes lo que hacen los payasos cuando se equivocan? Ta…¡Chan!”, comenta Álex Clavero.