El Francotirarock y la vuelta al trabajo

Toca ya despedirse del olor a playa y volver al olor de la oficina. Ese momento del año en el que intentamos recordar cómo se usa un teclado y tratamos de encontrar nuestro escritorio debajo de una montaña de papeles acumulados durante las vacaciones. Es como intentar encajar en tus jeans favoritos después de un festín navideño: incómodo y desafiante.

Además, no ha sido un verano especialmente fácil como nos ha recordado el humorista de Casasola de Arión: “Después de 30 olas de calor, una Dana y el mensaje que nos mandó el 112…¡Estamos vivos! Vaya zambombazo al móvil…¡Un ruidaco que no sabías si 112 era el remitente o las pulsaciones en reposo!”. Si, ayer los madrileños recibimos una alerta en nuestros teléfonos que nos recomendaba encarecidamente que nos quedáramos en casa ante la previsión de unas lluvias torrenciales que iban a dificultar y mucho estar por la calle. “Hoy no salgas de casa… Y le digo, ¿Y mañana? - ‘Vas a trabajar’... Y llegó el día, os he echado de menos, sí, os he echado de menos, cuando han traído el termo del café, ¡He llenado mi vaso y a vosotros os he echado de menos!, bromea el Francotirarock.